Las cosas no se pueden hacer «a lo loco».
Definir una buena estrategia de comunicación y marketing para una marca es clave si queremos conseguir los objetivos que el cliente se plantea.
Por eso, antes de «beber la leche» hay que ordeñar la vaca, colocar el taburete en la posición idónea, que la vaca esté tranquila, agarrar con fuerza la ubre y… zas!!! que no se derrame ni una gota.